Actualmente, nos encontramos en la época de la inmediatez. Tenemos que confirmar si vamos a asistir a un evento casi que de inmediato cuando nos invitan. Tenemos que dar una opinión de inmediato cuando alguien nos cuenta sobre algo (o por lo menos eso es lo que se espera). Tenemos que pronunciarnos frente a un evento polémico que involucre a nuestra comunidad, o de lo contrario no estamos suficientemente involucradxs. Si alguien nos envía un WhatsApp o un correo electrónico, también espera una respuesta de inmediato.
Todo esto nos ha llevado a que los límites, que usualmente eran esperados también socialmente se hayan desvanecido con el tiempo. Actualmente, incluso puede ser difícil identificar cómo suena poner límites, o cuando alguien está dejando un límite establecido y puede que no lo estemos respetando.
¿Qué podemos hacer cuando alguien está conversando de un tema e identificamos que aún no hemos construido una opinión al respecto?
Decir: “No me siento cómoda opinando sobre eso en este momento. Podemos hablarlo en otro momento, si es que siento que ya sé la información suficiente para opinar o ya me siento cómoda haciéndolo”.
Escrito por: Marie Saldaña / Psicóloga en EITA