Frecuentemente, se nos pregunta: ¿qué enfoque tiene EITA? ¿Qué tipo de “terapias” hacen?
El enfoque de EITA parte de una profunda reflexión filosófica y ética (siempre en constante renovación) sobre lo que es el autismo y el trabajo con personas autistas.
Para tener una idea más clara, léase nuestra concepción del autismo. No buscamos la “normalización”, sino lograr la vida plena de la persona autista de acuerdo con su condición.
Buscamos superar el enfoque médico y de la patología en nuestro acercamiento. Por ello:
- No son “pacientes” sino “participantes”.
- No hacemos “diagnósticos” sino “detecciones”.
- No brindamos “terapias” sino “acompañamientos”, “intervenciones”, en los que buscamos crear lazos de empatía, escucha, comprensión y acción.
Para realizar nuestro trabajo planteamos y utilizamos herramientas psicoeducativas que permitan a la persona autista y sus cuidadores:
- Comprender su condición y el respeto a sus diferencias.
- Comprender las particularidades de su entorno y las habilidades sociales neurotípicas para poder interactuar con el entorno y aprender a protegerse.
- Comprender sus procesos de aprendizaje y posibilitar su aprendizaje con satisfacción.
- Brindar la orientación a las escuelas, centros de estudio y de trabajo y demás entornos para realizar las adecuaciones y apoyos necesarios para el desenvolvimiento pleno de la persona autista.
- Poder realizar un proyecto de vida propio en base a la autonomía, determinación y acceso a los apoyos pertinentes.
- Trabajar por el empoderamiento de la persona autista, reconociendo y garantizando el acceso a sus derechos ciudadanos, considerando y respetando toda forma de diversidad y pluriculturalidad.
Buscamos y trabajamos por la generación de una convivencia respetuosa entre todas las formas de neurodiversidad y por los derechos humanos de la persona autista.
Por todo ello nuestro trabajo no se resume en un “método” o “terapia” sino en una comprensión profunda filosófica y ética de la persona autista y los apoyos necesarios para cada cual considerando su individualidad, su dignidad y su desarrollo pleno.